viernes, 27 de febrero de 2015

96. El Cerebro y el Cambio Climático

Hola amigos,
Leía en la sala de espera de un médico, la revista colombiana Semana, y encontré este artículo que me pareció muy interesante: 
"Mientras la semana pasada, en la ONU se discutía acaloradamente, los peligros del cambio climático, un grupo de psicólogos se dió a la tarea de explicar porque el cerebro humano no ve este problema como una verdadera amenaza.

El reto de los activistas es tratar de integrar estas razones en el discurso para promover un cambio de actitud.

1. No es un peligro visible: a diferencia de un terrorista, el cambio climático no tiene forma física y por ellos es un crimen indetectable.
2. No hay un culpable: aunque el dedo acusador señala primero a China como el país con mayores emisiones y menos compromiso, no hay un único sospechoso.
3. Es una amenaza atemporal: sus estragos pueden aparecer hoy y en 100 años, por lo que se requiere de sacrificios inmediatos para un futuro incierto, y los humanos no están acostumbrados a ello.-

domingo, 1 de febrero de 2015

95. ¿Cómo causar una Buena Impresión? La revista Forbes nos contesta

Hola amigos, 
Hoy les transcribo (sintetizadas por mi), los 13 hábitos que la Revista Forbes encontró, ponen en práctica las personas que tienden a causar buena impresión.

1. Preguntan
Casi todos estamos pendientes de lo que vamos o no vamos a decir, pero solo las personas más abiertas están más interesadas en lo que los demás dicen. Y la mejor manera de demostrarlo es preguntar. Con las interrogaciones podremos demostrar que estamos realmente escuchando lo que nos dicen.  

2. Se separan de sus celulares
Si estamos mirando el móvil mientras otra persona nos está hablando, estaremos mostrando una alarmante falta de interés en la conversación. 

3. Son auténticos
Cuando una persona se siente a gusto consigo misma, no necesita fingir que es alguien más. Y esa seguridad, esa autenticidad, es percibida por los demás y apreciada. Ellos saben cómo va a reaccionar en todo momento una persona auténtica, así que se contagiarán de esa sensación de seguridad y la persona les gustará automáticamente


4. No juzgan a los demás
Tener una mente abierta y poseer unos esquemas mentales flexibles son características necesarias para poder entender a los demás. Nadie quiere tener una conversación con alguien que ya tiene una idea fija en su cabeza y no se baja del burro. En el trabajo, esta actitud es fundamental: supone estar abierto a nuevas ideas y a negociar, para conseguir soluciones. 

5. No buscan ser el centro de atención
Las personas que más simpatía despiertan son las que menos importantes se creen. Para gustar, es mejor acercarse a otra persona con naturalidad e interesarse por ella.

6. Son constantes
Cuando alguien se acerca a una persona y sabe lo que puede esperar de ella en todo momento, confiará en ella. Y si lo que espera es positivo, le agradará sobremanera. Por eso los más carismáticos siempre son constantes con sus acciones y emociones. 

7. Usan su lenguaje corporal
Mirar a los ojos, sonreír, no cruzarse de brazos, acercarse a sus interlocutores pero no apabullarles invadiendo su espacio personal 

8. Causan una gran primera impresión
Conocer a alguien por primera vez puede ser una situación algo tensa, pero si la sabemos manejar con soltura, podremos ganar mucho con esa persona. Algunos investigadores aseguran que los 7 primeros segundos de una conversación con alguien nuevo son fundamentales. Es en ese momento cuando los interlocutores se hacen una idea de cómo es la otra persona. Para causar una grata primera impresión, es fundamental dar un buen apretón de manos, mirar a los ojos, sonreír, mantenerse erguido y hablar con un tono de voz seguro. 

9. Saludan a las personas por su nombre
Un pequeño toque de educación que siempre gusta. Saludar con el nombre de la persona que vemos siempre genera una respuesta más positiva que un simple ‘hola’. Y no solo eso, también cuando se dirigen a alguien utilizan su nombre. 

10. Sonríen
Las personas felices y alegres resultan más atractivas y simpáticas que los taciturnos. Sin sonreímos a alguien que nos está hablando, estaremos generando un clima positivo. 

11. Saben cuando contar sus secretos
Contar un problema personal en el momento adecuado estrecha los vínculos con nuestro interlocutor. Pero cuidado, hay que hacerlo en el momento adecuado y en las dosis justas

12. Saben cuando tocar y cuando no tocar
Un beso, un apretón de manos, un abrazo o una palmada en la espalda en el momento justo pueden refrendar y estrechar una relación. Pero también pueden ser percibidos como gestos poco auténticos.  

13. Mantienen un equilibrio entre pasión y diversión
En el trabajo, no están absorbidos por las tareas. Saben levantar la vista y hablar con sus compañeros. Pero no cotillean o no utilizan lugares comunes: recuerdan lo que han hablado con ellos y se interesan por sus problemas y vivencias. -