Dice don Juan de la Cosa, que una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa, pero que una cosa y otra cosa son todas la misma cosa_
Y QUÉ ES LA “COSA”?*
"Cosa" es, posiblemente, la palabra más usada del idioma castellano.
La cosa puede ser objetiva o subjetiva, abstracta o concreta. Pero ya
sea una *cosa* o la otra, la *cosa* es que la *cosa*, identifica, explica o se
aplica a cualquier *cosa*.
En relación con esta *cosa* de la *cosa*, veamos como pudiera actuar la
*cosa* en la consulta de un galeno a la cual acude un paciente ya bastante
entrado en años:
Doctor: Bueno, usted dirá qué *cosa* le trae por acá.
_Paciente_: Pues la *cosa*, doctor, es que desde hace un tiempo a esta
parte, al levantarme por las mañanas siento una *cosa* rara, una *cosa* maluca,
así como si todas las *cosas* me dieran vueltas en la cabeza.
Doctor: ¿Y qué tiempo hace que viene usted padeciendo eso?
_Paciente_: Hará *cosa* de un mes…
Doctor: ¿Ha tomado Ud. alguna *cosa* para lo que siente?
_Paciente_: La verdad doctor, es que me han recomendado mil *cosas*,
pero yo no hago caso a las *cosas* que me dice la gente.
Doctor: Bueno, pues en primer término le diré que a mí me gusta ser muy
claro en mis *cosas*.
Esa *cosa* que usted está experimentando, es una *cosa* que le suele
pasar a las personas de edad avanzada como Ud. Y lo peor de la *cosa* es que
para esa *cosa*, no se ha inventado todavía ninguna *cosa*.
_Paciente_: ¿entonces la *cosa* es seria?
Doctor: No hay duda que requiere atención. Yo le recomiendo tres cosas: la primera, es que tome Ud. las *cosas* con calma. La segunda cosa que le aconsejo, es que no vaya ud. a hacer nada disparatado.
_Paciente_: ¿ *cosas* disparatadas a mi edad?
Doctor: Bueno, se lo digo por aquello de que: “el diablo está en las
*cosas*”.
_Paciente_: doctor ¡mire que usted dice unas *cosas*!
Doctor: La tercera cosa es que quiero que se tome esto que le estoy
recetando por una semana. Si en ese lapso de tiempo Ud. nota que la *cosa* no
mejora, vuelva para ver qué otra *cosa* podemos indicarle, porque tenemos que
evitar que esto degenere en otra *cosa*, porque entonces sí que la *cosa* se
pondría más difícil.
_Paciente_: Muy bien, doctor. Y ahora, quisiera Ud. decirme ¿Cuánto va a
costarme esta cosa?
Doctor: Mire, hable con mi secretaria que es la que se ocupa de esas cosas.
_Paciente_ (dirigiéndose a la secretaria): Dice el doctor que me diga
cuánto es la cosa.
Secretaria: Cómo no, pero no se preocupe, que eso no es una cosa del
otro mundo. Son solamente $500.000.
_Paciente_: ¿Qué cosa? Mire niña hasta dónde han llegado las cosas !
(Anónimo)